Gran Bretaña se niega a calificar a China como amenaza tras arresto por espionaje
El gobierno británico resistió el lunes a la presión de calificar a China como una amenaza tras la revelación de que un investigador parlamentario fue arrestado por sospecha de espiar para Beijing. China calificó la acusación de una “ofensa maliciosa”.
La secretaria de Negocios británica Kemi Badenoch declaró que Gran Bretaña debe evitar llamar a China “un enemigo” o usar lenguaje que pueda “escalar” las tensiones.
“China es un país con el cual hacemos muchos negocios”, expresó Badenoch a Sky News. “China es un país que es importante en cuanto a la economía mundial. Tiene un asiento en el Consejo de Seguridad de la ONU. Definitivamente no deberíamos estar describiendo a China como un enemigo, pero podemos describirla como un desafío”.
Max Blain, portavoz del primer ministro Rishi Sunak, dijo que sería equivocado reducir la política británica hacia China “a una sola palabra”.
“Tenemos que tomar la oportunidad de comunicarnos con China, no simplemente gritar desde afuera”, indicó Blain.
Las tensiones entre Gran Bretaña y China han ido en aumento en años recientes debido a acusaciones de subterfugio económico, violaciones de derechos humanos y la represión china en el antiguo territorio británico de Hong Kong.
Los conservadores en el gobierno británico están divididos en cuanto a la estrategia hacia China y en cuanto al acceso que se le debería dar a las empresas chinas a la economía británica. Los sectores más nacionalistas quieren que Beijing sea declarada una amenaza y no simplemente un desafío, el término que ha usado Sunak.
Según la nueva Ley de Seguridad Nacional en Gran Bretaña, si China es oficialmente declarada una amenaza, toda persona que trabaje “bajo la dirección” de Beijing o de una empresa vinculada al Estado chino tendría que registrarse y enumerar sus actividades, bajo pena de cárcel.
Los sectores más nacionalistas dentro del Partido Conservador reanudaron sus pedidos de una política más dura luego que la Policía Metropolitana confirmó este fin de semana que un hombre de unos 20 años y otro de unos 30 fueron arrestados en marzo bajo la Ley de Protección de Secretos. Ninguno de los dos ha sido instruido de cargos, y ambos salieron en libertad hasta octubre mientras cursa la investigación.